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Notas de Mr. Kite

Se oyen rumores de que el silencio canta por las noches

Se oyen rumores de que el silencio canta por las noches

Hay veinticinco canciones que hacen que todo tenga sentido, pero son cambiantes. Es inútil intentar hacer el esfuerzo de atraparlas en una lista, son canciones de naturaleza aleatoria y pertenecen a esos elementos de los que consta la biblioteca borgiana de Babel. No puedes retenerlas en una lista, porque duran segundos y luego ya no son las mismas.

Por ejemplo, imagina el número diez de esa lista, quizás por un momento fuera una canción de Katie Meloua pero, en el siguiente instante podría pasar a ser una canción de Traffic. La lista cambia tan facilmente como surge una lluvia repentina o el ambiente cargándose de sequedad.

Un amigo me dijo hace poco "si no fuera por la música...", y los que estábamos nos quedamos impactados por la frase y por los puntos suspensivos. La música nos propone alternativas reales a una realidad que nos maltrata. Y ahora no voy a hacer un panegírico de la música, hay tantos hechos que resulta artificial. Prefiero decir que la música no tiene un rostro inmutable, ni un nombre perenne, ni un número eterno al que llamar. El rostro, el nombre, el número siempre cambian...pero para los que no entendemos el mundo sin acordes siempre hay un rostro, un nombre y un número que nos hace todo distinto.

Escucho "no face, no name, no number", de Traffic. No es la mejor, pero ahora se me eriza el vello con estos sonidos grabados hace cuarenta años y que yo escuché por primera vez hace quince pero que siempre vuelven. Y como ejemplo...

Querido señor Fantasía

tócanos una canción

haz lo que sea para sacarnos de esta tristeza

canta una canción, toca la guitarra, hazlo ya

Eres el único que puede conseguir que ríamos

pero cuando haces eso, te deshaces en lágrimas

por favor no estés triste, si lo que vivías era lo correcto

no hubiésemos sabido de ti todo estos años

De nuevo Traffic, Dear Mr. Fantasy, pura psicodelia de finales de los sesenta. Con Jimmy Miller en la producción todo es más fácil, y si no que se lo digan a Primal Scream. Pero claro, con Stevie Winwood, Jim Capaldi, Dave Mason y Chris Wood también.

Y ahora, una pequeña pirueta sin entidad física está saltando de brizna de hierba en brizna de hierba con la inquietud que le concede un día caluroso de noviembre. El dislate del clima atrapa también a los espíritus libres e irreales. Los colores del terciopelo se están tornando en matices grisaceos debido a la ausencia de frío.

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