Blogia
Notas de Mr. Kite

Tango 3 - ESTROFA SEGUNDA – Parte 2 de la letra del primer deseo

Tango 3 - ESTROFA SEGUNDA – Parte 2 de la letra del primer deseo

ESTROFA SEGUNDA - LETRA DEL PRIMER DESEO

Estos planes tan ambiguos unidos a un horario implacable de 8 a 3 hacían que no hubiera rutina de escalera salvo con alguno de los vecinos jubilados que pasaban el día del piso a la calle a contemplar una nueva obra o un nuevo socavón, y de allí nuevamente al piso a criticar el mundo desde esa ventana a lo ajeno, esa puerta a otros universos, que era la televisión.

De ahí que apenas se hubiera fijado en Livia, en realidad nunca se la había encontrado pues, de haberlo hecho, habría reparado sin duda en ella. Un rostro angelical torneado por un cabello rubio daban vida a una sonrisa más propia de un universo construido en un solar de belleza que de un ser terrenal. Su cuerpo era sencillamente perfecto, al menos a los ojos de Gari, y probablemente a los de cualquiera. Livia era simplemente un ser tan único en su belleza que cualquiera quedaría embobado contemplándola durante horas. Así se hubiera quedado ese día Gari, horas, días y puede que eras cosmogónicas usando el tiempo en contemplar la persona más bella que había visto jamás. Pero hasta ese día solo tenía constancia de un nombre de familia romana que se alojaba en el edificio.

Cuando se cruzó con ella Gari solo pudo decir “uh…hola”, y ella respondió con el rostro rígido y con una mueca de sonrisa con otro “hola” más seco y con mayor aplomo que el de un terrible burócrata firmando una sentencia de muerte. Gari intentó disimular cierta indiferencia mientras ella proseguía su camino escaleras arriba. El valor de ese saludo Gari no podía saberlo, pero sí pensó que era más un “no te me acerques más” que un “me gusta saludarte”. Y Gari se sintió triste.

 

 

0 comentarios